🌍 En el marco de la COP29, el debate sobre los sistemas alimentarios se ha intensificado, y con razón: el cambio climático amenaza la capacidad del planeta para alimentar a una población que alcanzará los 10.000 millones de personas en 2050.
Para muchos, esto ya no es nuevo: se estima que, de no transformar profundamente la manera en que producimos, distribuimos y consumimos alimentos, no tendremos recursos suficientes para garantizar la seguridad alimentaria global. Al mismo tiempo, la agricultura es responsable de cerca del 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que nos sitúa ante un doble desafío: producir más con menos, sin dañar el planeta.
👩🌾 Como ingeniera agrónoma, trabajo con actores del sector agroalimentario que enfrentan estos retos día a día, y quiero compartir algunos de los principales problemas a abordar que, de nuevo, a muchos les resultará familiar :
🔴Producción amenazada: Los rendimientos agrícolas ya están disminuyendo en muchas regiones debido a sequías, inundaciones y temperaturas extremas. Esto compromete la estabilidad de los sistemas alimentarios.
🔴Uso insostenible de recursos: La agricultura consume el 70% del agua dulce disponible y degrada los suelos a un ritmo alarmante.
🔴Pérdidas y desperdicio: Un tercio de los alimentos producidos se pierde o desperdicia, un dato inadmisible cuando tantas personas enfrentan hambre o malnutrición.
🌱 Soluciones para un futuro alimentario sostenible
A pesar de este panorama, en la COP29 se discutieron soluciones que ofrecen esperanza. Estas transformaciones son clave para garantizar la sostenibilidad de los sistemas alimentarios:
1️⃣ Restauración de suelos y captura de carbono: Apostar por la agricultura regenerativa como herramienta para revertir la degradación de los suelos y aumentar la resiliencia de los cultivos.
2️⃣ Transición hacia tecnologías sostenibles: Incorporar prácticas que optimicen el uso de recursos para proteger tanto a las personas como al medioambiente.
3️⃣ Reestructuración del consumo: Fomentar dietas más sostenibles y reducir las pérdidas en toda la cadena de valor alimentaria, desde el campo hasta el consumidor.
4️⃣ Acción climática local: Empoderar a agricultores y comunidades para que sean agentes de cambio mediante capacitación y acceso a conocimiento adaptado a sus realidades.
🤝 Una responsabilidad compartida
El futuro de la alimentación depende de que cada uno de nosotros tome acción desde su rol. Esto no es solo una tarea para gobiernos y organismos internacionales; es un llamado para todos los actores del sistema agroalimentario, desde productores hasta investigadores y consumidores.
📌 Reflexionemos sobre qué pasos podemos dar hoy para transformar el mañana. ¿Cómo te imaginas que podemos abordar estos desafíos desde tu entorno?
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